sábado, 18 de julio de 2009

quiere que las palabras lo envuelvan,
quiere que lo eleven y lo hagan hablar,
quiere que una palabra sin nombre y sin dueño
se apropie de él,
quiere volvernos a decir lo que no ha dicho,
y se queda en silencio,
erotizando las palabras que no van a llegar.


el orden del discurso

1 comentario:

Anónimo dijo...

Un absoluto placer leerte, tus palabras encierran una extraña belleza. Me encanta como escribes.